La kleptocracia La delincuencia en la URSS - Meney
La Kleptocracia: verdadera sociedad paralela sin la cual la vida corriente en U.R.S.S. sería insoportable. Una sociedad que une la viveza, el ingenio y la estafa. En ella encontramos una criminalidad común a Occidente: prostitución y gran bandidaje. Pero sobre todo, a grandísima escala: especulación, saqueo, secuestro de toneladas de mercaderías, contrabando industrial de productos, sobornos en la enseñanza y la medicina.
“El robo es una de las incurables concomitancias del capitalismo’’, proclama la Gran Enciclopedia soviética.
¿Por qué, en semejantes condiciones, cada año se pronuncian en U.R.S.S. 100 penas capitales únicamente por crímenes económicos? ... después de más de sesenta años de socialismo. La corrupción y el mercado negro están en pleno apogeo. Así lo denuncian todos los días la Pravda y miles de diarios en todos los rincones del imperio soviético. Hasta los Izvestia, órgano del gobierno, revelan que la policía y los jueces disfrazan los datos sobre la delincuencia.
Los soviéticos conocieron la penuria. La remedian plegándose a las reglas del mercado negro y a los rituales de la corrupción. Por necesidad o por interés. La mayoría de las veces, no hay alternativa.
La Kleptocracia muestra el dinamismo de la contrasociedad que construyen cada día 268 millones de ciudadanos soviéticos. Es la epopeya que pesará sobre el futuro de la segunda potencia mundial.
